Tras una airada protesta contra el juez de línea, Ballivián fue expulsado cuando el partido llegaba a su culminación. Unos días después se emitió una sanción calificada de injusta por el jugador, que le obligaba a quedar fuera de toda actividad futbolística por el lapso de seis meses calendario.
A pesar de haber ocurrido el incidente en el marco de un partido de la selección nacional, la sanción del TSDD incluyó partidos de la Liga y encuentros internacionales con su club, algo totalmente fuera de lugar, a criterio de la dirigencia.
No obstante, Ballivián viene cumpliendo a cabalidad dicha sanción, aunque, se conoce que en los próximos días llegaría una nueva resolución que alivianaría dicho castigo a sólo cuatro partidos con la Selección y la libertad de jugar con su club.
Consultado al respecto, Ballivián auguró que este extremo sea una realidad y sólo se limitó a decir que está a la espera de dicha resolución escrita para estar habilitado y así poder jugar lo antes posible. "Sería lindo jugar aunque sea el último partido frente a The Strongest", dijo el jugador.
El equipo trabajó en el Patria
De cara a su partido adelantado frente a Real Potosí, a jugarse mañana, miércoles (20:00), en el estadio Víctor Agustín Ugarte de la Villa Imperial, Universitario retornó a los entrenamientos luego de su empate (1-1) conseguido en Warnes, ante Sport Boys.
Los que jugaron frente a los warneños realizaron un trabajo liviano, en tanto que el resto de los jugadores aprovecharon el estadio Patria para realizar una práctica de fútbol.
Hoy, miércoles, el plantel cerrará sus entrenamientos en la cancha de El Bosquecillo, desde las 10:00.
